jueves, 17 de septiembre de 2015

HABLO EN SILENCIO.

Yo perdí tiempo y tú a una persona que te quería de verdad.
Comprendí que mi insomnio tenía un nombre.
Comprendí que mi repentino humor era fruto de pendientes, tus pendientes.
Había una vez, si había una vez como empiezan los cuentos y esto fue un cuento de hadas de nunca acabar.
Aprendí a remar sobre mis lágrimas, Aprendí que los abrazos no se regalan a cualquiera y sobre todo las noches donde solo el placer es mi deseo, ¡sí! Adicta al sexo me eh convertido, por tu culpa, por mi culpa, por nuestra culpa…
Quiero salir corriendo y no volver a escuchar nunca más tu nombre, Detesto este 16 de septiembre y no por el frio si no porque me eh dado cuenta que soy otra o quizás siempre fui así pero recién ahora puedo ver quien soy.
Aprendí a caminar sola, con la música, como si todo fuera una película, aprendí a observar, pensar y sobre todo a callar, sonreír porque así debí estar siempre.
Como es que ya no siento más amor por nadie, una vez un chico muy apuesto me pregunto qué porque no quería besarlo y solo atine a darme media vuelta mientras él me miraba a lo lejos, siguió mis pasos y decidió preguntarme una vez más a lo cual yo sentía acoso, me dijo que si al menos no quería nada podríamos ser amigos y así fue…

Gracias a él aprendí que para vivir sola, segura y sobre todo querida no se necesita de nadie, porque no necesitas mendigar amor y sobre que “eso” llega solo y sin buscar o esperar.
Llego el momento en que mis  hermosos “ EXS” dejaron de ser una tortura o un acaso para mí, quizás uno necesita un abrazo, un beso, sexo o simplemente amistad…
Pero decidí que no haría nada de esas cosas con personas que no valoraron ni tuvieron respeto por mí.
Me los encontré en varias ocasiones y siempre dejaba con un mal sabor en sus labios, quizás porque querían decirme algo pero mis piernas decidieron seguir el camino.
No eh dicho que nunca Amé porque si ame en poco tiempo, hice cosas que con el primer amor nunca hice, el segundo fue mi karma por lo que el  tercero se vengó de mí y así pude sentir lo mal y bueno que es este sentimiento.
Estoy con unas copas de más pero a mí no me importa nada porque lo único que quiero es Ver-lo que pasa en mi camino porque no hay prisa, no hay urgencia…
Siento el aire que me recuerda el aroma de su cuello y que sentimiento tan bello…
Quizás él me quiere a mí? No sé qué hago escribiendo esta canción de Golden Ganga pero es divertido porque me hace acordar algunos capítulos de mi vida.
Bueno mejor me voy a dormir antes que termine delirando y comience escribiendo cosas muy románticas que solo en mi ebriedad florecen, al igual que mis besos y caricias,  HOY QUISIERA QUE EL tiempo se detuviera. 

lunes, 14 de septiembre de 2015

14 SEP 2015

Olvido, es una palabra grave, dice la gramática y también la vida misma. Olvido. Una palabra que, si mi opinión les viene adecuada, tiene una estructura hermosa. Olvido, una palabra que debería ser, aparte de protagonista en tantas historias a través de los años, el reflejo de lo bello y de lo que no lo es tanto. Del miedo y del placer. Olvido. Una palabra tan gastada por el uso diario y el abuso. Olvido, una palabra que se escribe para
contradecir su razón de ser. Su motivo de vivir. Hay palabras que con frecuencia olvido, pero esta, no es una de ellas. Si he de ser franca, el olvido, no es una opción. El olvido es capaz de apagar las risas, de mermar los restos del alma juvenil que vaga entre recuerdos a distancia y puede, incluso, disolver las ilusiones de años venideros. Y el olvido es grave siempre que te haga dejar de sonreír. Por eso yo no te olvido. Puede que te haya guardado durante años, en cajas que acumularon motas de polvo, en el desván de mi vida. Puede incluso que haya manchado tu rostro con el café recién hecho y doblado la esquina de la página que escribimos alguna tarde, a orillas de un río. Pero no olvido. Y no es que la palabra, sea grave según la gramática del español, ni según la vida misma. No te olvido porque sea difícil y el terapeuta, decidiera subir su tarifa de honorarios, sin previo aviso. El olvido, ya lo he dicho, no es una opción. Es que aún me arrebatas sonrisas, a pesar de la frialdad de tus respuestas comprometidas, mayormente, a causa mía. Porque esa amabilidad de no dejarme con la palabra en los dedos, la valoro por ser una fracción de tu vida. Y no quiero el olvido. No me hace falta. Que olviden aquellos a los que el pasado no les sirve.
Pese a que vivir de recuerdos es, de cierto modo, insano, mi presente lo disfruto como la niña que sale de su casa la mañana de navidad a jugar con todos sus regalos. Y sin embargo, cuando cae la noche y los insomnios organizan su aclamada fiesta de té, me enfrento al olvido. Ese olvido que en cierta temporada se va de vacaciones para escalar el Everest. Ese olvido que me hace compañía en algún lugar inexplorado de tu cabeza, donde me gusta pensar que, a veces, habito. Y se está agusto. Perdóname si no te olvido y aún me quede el descaro de decirlo. La verdad es que la letras son lo único que tengo en abundancia y por si las moscas, lo escribo antes de que se me olvide.

Bitácora de sueño.


Otra vez no puedo dormir. Tengo la razón clavada entre los ojos, aunque yo diga que no. Si te escribo es porque mis madrugadas están ausentes de ti. También mi vida y mis caídas. Todo es ausencia, si lo vemos desde mi perspectiva.

No quiero que se agoten mis RESERVAShttps://blogger.googleusercontent.com/img/proxy/AVvXsEjypmdL6ggNywXi1EnSPVbTIXBGbKw91X2xSrhwo99MJMZvIIJIZ3YztEPOUTMNPIvY9l9wI2LwmRr7YtKY_qY9EMZB_HI4_lnK6caorjYFVuwmSspR8vCNhtr3cfvUMMSV9gkLP6RC2I_HFxWoM7ssPBzS0TWDTsBnVJY= de sueño, a menos que sea para entablar una lucha por la posición de nuestros cuerpos. Aunque si lo pienso de otra forma, ese color té que tienen tus ojos, fácilmente me puede relajar. Entonces me pregunto si me ven a mí o a lo que fui. 

Eres mi amante insomne porque aunque quisiera, no puedo llamarte de otra manera. Vienes y haces de mis noches un tormento. Te acercas un poco y siempre voy a querer más de ti. Te alejas y entonces mis noches son insoportables. Como esta, como las siguientes y las anteriores.

Por tu culpa he corrido un derby desde mi cama y también llegado a la Luna. Porque desde entonces, mis noches me cuentan historias y te inventan en distintas formas. Porque te vuelves el torrente de cafeína, que me recorre el cuerpo durante el día. Entre sueños, me encuentro discutiendo con Neruda porque no puede ser que solo esta noche te pueda escribir versos, si todas mis noches las quiero contigo, porque al menos en las letras hago de ti lo impensable. Y es que ahorita solo busco pretextos, estúpidos, si así lo quieres ver. Pero tengo la habilidad de convertir pretextos en razones.

Otra vez no puedo dormir y la razón, no el pretexto, la tengo clavada entre los ojos. Me estoy cansando del vacío que tiene mi cama.
                                                                                                                    

viernes, 4 de septiembre de 2015

La vida se me va con lo que escribo...

Si tan solo pudiera gritar y decir cómo me siento en estos momentos, solo quisiera  seguir llorando…
En esta vida nos encontramos con mil personas, nos llevamos bien, compartimos risas, recuerdos, anécdotas que más puedo decir, compartimos vida.
Tenías ese rostro angelical, desde la primera vez que te conocí pude sentir tu alma, tengo esas intuiciones que nunca me fallan pero por miedo siempre me las guardo, mira que no me equivoque contigo.
Eras igual a mí, juro que lo eras, tan sereno que calmabas mis ansías, tratabas de cantar y calmar mis melodías apresuradas, desde que te vi, dije que amaba tu forma de ver la vida, tan simple, tan feliz, tan tú.
Arturo era tu nombre, perfecto quizás, si no necesitaba nada solo seguir conociéndote, tus 25 años me hacían verte interesante, profesional, espectacular, siempre con sabios consejos y siempre claro con lo que quería, todo un caballero de pies a cabeza, jamás callaste es más siempre hacías ruido en mi corazón cuando te tenía cerca.
Es esta vida loca, desdichada que no me dejo bailar contigo aquella noche del 27 de este mes, me decías baila conmigo y disfruta como si fuera el ultimo, olvida todo y toma de mi mano y entre risas y risas negué ese baile que mis nervios terminaron de arruinar…
Porque te tuviste que ir tan pronto? Sobre todo sin avisar...
Encajabas mis sentidos, mis latidos, encajabas todos mis años perdidos, me enseñaste que el amor puro viene sin avisar, así despacio, así silencioso…
Recuerdo aquella vez en esa terraza conversando de la vida y tú poniendo una canción que pensarías que me gustaba, cantabas y solo atinaba a ver como tus ojos resaltaban con esos foquitos amarillos amarrados de esquina a esquina, como tu barba se me hacía sensual y tu boca me provocaba a besarla sin parar, pero otra vez falle, mis nervios lo arruinaron y maldigo el momento en que no hice todo eso contigo, un sentimiento mutuo y puro que me hace llorar de impotencia…
No tengo palabras para expresar este gran vacío que dejas en mí.
Fuiste el único que escuchaba mis atolondradas historias, que me aconsejaba para que nadie me hiciera daño porque no lo soportarías, mil años teniéndote cerca y yo sin poder hacer nada por el miedo a fracasar, trataste de confesar tu amor por mí pero yo estaba en otra dimensión que no podía creer ese sueño hecho realidad, Arturo porque te vas sin despedir…
Que voy hacer sin ti ahora? Que voy hacer sin tus abrazos confortadores, sin tus consejos, sin tus caminatas, sin tus bailes, sin tus cantos, sin todos los años vividos, sin ti…
Recuerdo verte caminar por esas calles de barranco saltando y riendo como loco, estabas con esa chompa abstracta que me encantaba, tan hermoso, tan tú, no podía contenerme frente a ti, tomabas de mis manos y decías “porque eres tan hermosa amiga mía, te adoro”, porque te han hecho tanto daño, porque eres tan autentica, eres mi ángel, maldición tengo un nudo en la garganta y no puedo contenerme, exijo un encuentro…


Como puede ser la vida tan injusta, necesito seguir escuchando tu melodiosa voz, necesito ese último abrazo y necesito contarte que ahora sufro por ese amor que jamás te confesé, necesito gritar porque ya no estás conmigo, ando muerta en vida…
Vivo porque debo vivir.
 Perdóname por no estar en estos momentos contigo, pero no soporto la idea que ahora ya no estés conmigo compartiendo esta hermosa luna.
Perdóname porque para mí esto no es un adiós es un hasta luego, perdóname porque sé que no te gusta verme llorar, perdóname  por esas veces que te hice renegar, reír, llorar, nunca soltaste mi mano porque siempre confiaste en mí, siempre decías que sería grande, siempre decías que mi alma era tan pura como la tuya y ahora lo creo porque Dios te quiere como ángel…
Juro que estarás conmigo a donde vaya, siempre habrá alguna ocurrencia, alguna canción que me identifique contigo, TE amo tanto que pediría un día entero contigo en el cielo!
Hasta pronto Arturo, te has llevado mi alma contigo…

miércoles, 2 de septiembre de 2015

Valiente!

Valiente es Quién dice lo que piensa, tal cual lo siente, sin herir.
Valiente es Quien no se adjudica toda La Verdad, sino Sus Certezas.
Valiente y válido es Quien está dispuesto a llegar a un lugar común sin convertirse en alguien ordinario.
Valiente es quien no necesita excusarse, pedir permiso, esperar a ser perdonado; para tomar conciencia de sus errores y mejorar.
Valiente es quien abandona la autofagia para encajar.
Valiente es Quien se amiga con su dolor, con sus pérdidas, con sus fracasos, con sus ausencias, con sus limitaciones;
no espera Maestros, ni aduladores; no espera condescendencia;
no se queja; SE ESCUCHA y aprende.
Valiente es Quien sabe cuando necesita ayuda y la pide;
Muy Valiente, Valioso y Valorado es Quien no olvida y agradece.

jueves, 27 de agosto de 2015

El Durante...

Lo más difícil es empezar. Y terminar. Dicen que lo que va en medio, las líneas que componen el cuerpo del texto, es lo más sencillo, lo más fácil de llevar, lo que más se disfruta. No sé, eso dicen.
Los comienzos. Los finales. Tú y yo siempre olvidamos que el texto también tiene cuerpo, que las historias también tienen un “durante”. Fuimos unos olvidadizos, unos pobres irresponsables. No comprendimos que los grandes poderes conllevan grandes responsabilidades. Que los grandes amores merecen un maldito desarrollo.
 
Lo peor que nos pasó fue que nos hicimos adictos a esos pequeños momentos de felicidad que nos brindaban los inicios. Todos nuestros inicios. Nos enganchamos a andar juntos cogidos de la mano, a abrazarnos hasta traspasarnos el alma, a besarnos hasta rompernos los huesos. Nos enganchamos a no saber, aún sabiendo. A hacernos los tontos mirando para otro lado, haciéndole creer al cosmos que podríamos juntos y no separados. Pero al cosmos no se le engaña, y tú lo sabes. Y yo lo sé. Pero tú más. Tú lo supiste mucho mejor que yo. Llevaste mis riendas sin quererlas ni coger, te colgaste mi corazón a la espalda y recorriste la ciudad impregnándome las calles de recuerdos.
 
Y ahora qué. Dime qué puedo hacer. Porque a día de hoy, a veces, aunque ya no deba hacerlo, sigo repasando los momentos que viví a tu lado. No fueron demasiados. Ni muchos ni pocos. Sólo fueron los justos y necesarios para hacerte imborrable. A veces sigo pensando en los principios, en todos nuestros principios y en la falta de ellos. Nos sobraron y nos faltaron a partes iguales. Nos sobraron, como nos sobraron los anocheceres. Nos faltaron, como nos faltaron los amaneceres. 
 
Nunca fuimos de esos que hacen las cosas como se han de hacer. Nunca fuimos juntos a cenar. Nunca fuimos juntos a lavar el coche. Nunca estuvimos juntos en ninguna boda. Nunca nos dijimos “para siempre”, pero tampoco “para nunca”. Yo siempre fui tu puerta abierta. Tu vida y tus arrugas de expresión. Tú fuiste mi último primer amor. Mi cara más bonita sin pintar. Mi precipicio emocional. Pero no recordemos nuestras carencias. No hagas que piense de nuevo en las vidas que podría haber vivido mientras esperaba a que la tuya arrancara. No me mires como sé que harías si estuvieras delante ahora. Y no, tampoco me toques la mejilla como si fuera de cristal. Te aseguro que si no me he roto ya, ahora ya no es el momento.
 
Te lo dije hace tiempo. Me copié de quien lo dijo, ya sabes, que “puedo vivir sin ti, pero no quiero”. Te lo dije mil veces. Y tú lo escuchaste asintiendo. Lo escuchaste sabiendo que el café se enfriaba, que tu corazón se cerraba. De nuevo. Otro final.

miércoles, 26 de agosto de 2015

Supongamos que te echo de menos...

https://www.youtube.com/watch?v=RD9xmhSrcYE

Supongamos que te echo de menos... 

¿Volverías? 

Supongamos que...no hay día en que no me acuerde de ti, y cada vez que te pienso tenga que distraerme para poder parar. Supongamos que me atrevo a decirte algo. 

¿Reaccionarías? 

¿Crees que merece la pena empeñar mi orgullo? ¿Empeñar la poesía? 

Supongamos.. que desaparece aquel mes, aquel fin de semana. Supongamos que aquello no acabó conmigo. Supongamos que quiero ir de nuevo a la estación e intentar captar una imagen mientras llega el tren.. y tú con el.

Y ahora... ahora yo supondré que tú aún no me has olvidado, que no has borrado ni una sola fotografía mía, ni un solo mensaje.. ni una sola carta.. que tu intención no era la de alejarme matándome poco a poco. Que aun queda esperanza, que no la hemos desperdiciado toda..

¿Marcarías mi número?

Son las cuatro de la mañana de cualquier día de enero y es tu silencio el único que ahora me despierta al caer la noche. Es tan difícil conciliar el sueño después de habértelo regalado a ti. A veces pienso en llamarte, o escribirte para que me lo devuelvas. Echo tanto de menos a la persona que solia ser antes de conocerte, antes de convertirme en la mitad de todo, de nada. 

Sin ti me sobran la mitad de todos mis cigarrillos, los cinco minutos de más después de apagar el despertador, una cucharada doble de azúcar en el café, media botella de butano al ducharme. Me sobra la mitad de la cama, de la almohada, del sofá. Sin ti las películas las veo enteras y leer antes de cerrar los ojos ha dejado de ser mi estrategia para que me quitaras el libro, y siguiéramos con la poesía debajo de las sábanas. 

Y sin embargo, te fuiste.

Y a mí solo me queda suponer que a ti también te sobran las mismas mitades que a mí, que tú también echas de menos mis manos cuando tienes frío, y que Madrid es la mitad de bonito sin nuestros besos en mitad de la Gran Vía. 

Sigo parándome delante de cada tienda de libros viejos, pero ahora sin ti, por si te viera pasar. Sigo notando tu nombre en mi nuca cada vez que me recojo el pelo y sigo notando tus dientes en la cicatriz que me dejaste en la clavícula. 

Ojalá decir que te grabaste en mi piel a fuego fuera solo una metáfora más. 

Ojalá decir que te llevaste mi corazón... no fuese tan real. 

Lo echo de menos, ¿sabes? echo de menos oírlo latir al otro lado de mi pecho. Acunarlo por la noche y leerle a Salinas para que cogiera el sueño. 

Mi amor, léele a Salinas, que solo él sabe describir en verso, lo mucho que a ti... también te echo de 
menos..

sábado, 15 de agosto de 2015

Llámalo amor o como tú gustes...

Hace mucho que no escribo para vos, hace mucho que ya no tengo ningún suspiro de amor por ti…
Hoy quería escribirte con todo el afecto que tengo, porque sabes muy bien que te amé.
Mi amor fue un poco alborotado, fue sincero y a la vez un poco dramático, pero fue AMOR.
Siempre te recordé, te llore en momentos que no debía llorarte y siempre te odie por dejarme sola cuando más te necesitaba, no queda tiempo para seguir quejándome de ti, no queda tiempo para seguir con este resentimiento que me hizo aprender que el amor no era así como lo sentía…
Quisiera no confesarte nada a estas alturas pero siempre odie tu forma tan mujeriega, tu forma fría de cómo supuestamente me querías y odiaba que te contradigas con tus sentimientos, quizás amaba que me dijeras que fui la mejor en tu vida placentera pero me hacía pensar que solo para eso yo era buena…
Había algo más bueno que solo entregarte mi cuerpo, pero creo que nunca supiste verlo…
Era amarte y entregar mi dedicación entera contigo.
Amaste a mil mujeres antes y después que yo, seguía firme a tu atolondrada forma de quererme hacerme tuya, tuve que acceder en varias ocasiones para no olvidarme de tu aroma y seguir plenamente con tu amor.
Pero el tiempo se me paralizo un día y me dijo que ya era suficiente aplastada de cabeza para seguir entregándote mi amor,  mi tiempo, por ni siquiera un abrazo y palabras claras cuando te veía o conversaba.
Ahora qué más da si tu inspiración no brotan mi nombre, escribes poemas pensando en un amor más, sufrida con este amor que me paralizo noches enteras pero que nunca me dejo de enseñar.
Me hizo más fuerte y resucitar del vacío que jamás pensaba resucitar.
Gracias por nada y a la vez por poco.
-


La intoxicación afectiva No es Amor 
La espera, el rechazo, la incertidumbre, la insistencia, el sufrimiento emocional, el sacrificio irracional, la frialdad...
El Amor no es morir lánguidamente, no es inevitable.
Muchas separaciones sirven para saber QUE NO QUEREMOS del Amor. 

Aprendí...

Sentados en esa terraza a la media noche, armando unos porros para contagiarnos de la alegría plena.
Coge su guitarra y empieza melodiosamente a tocar aquella canción que me estremece el cuerpo, su voz era un cántico de ángeles.
Cerraba los ojos y no me importaba nadie más, solo analizaba y veía la vida de otra forma…
Aquella vida que nos transforma en seres odiados o queridos, aquellos que se creen dueños de todo y a la vez de nada.
Que la vida que yo estaba presenciando era fuera de lujos, alejado de la basura diaria de gente desdichada que no comparte un solo pan con mil personas.
Gente que la ropa, los lujos se les hace más grande que un verdadero amor, gente que vive engañada por la estupidez  constante que genera en su cerebro por el maldito dinero.
Pobres desdichados.

El abrazo más sincero en toda mi vida fue de aquel joven tocando esa melodía.
Sentí el amor profundo y aquella paz plena que necesitaba mi vida para que mi corazón se abriera mucho más, no importaba nada solo seguir respirando aquel tabaco sabor a vainilla del chico de al lado.
Mi cuerpo estaba helado con este frio atroz en pleno invierno, no importaba la cobija, solo las risas idas y vueltas que nos dábamos a carcajadas en aquella terraza, que hermosa noche.
Vuelvo a respirar y a sentirme mil veces viva, no necesito nada más que seguir caminando sobre aquellas nubes muy cerquita del cielo, sentirme flotando con el corazón en paz, su amor puro me hacía sentirme completa, me amoldo y armo cada pedazo roto en todo mi cuerpo.
Estoy enamorada de ti, estoy completamente enamorada de tu alma, estoy contemplando tus ojos hermosos y estoy sintiéndote mi verdadero ángel.
Eres tan hermoso que no existe ninguna otra persona que pueda remplazar este único, léeme bien, ÚNICO amor en toda mi vida y que vida la mía.
Si dejara de suspirar por ti, si dejara de admirarte, nunca aprendería el sentido de la vida, de nuestras vidas!


miércoles, 22 de julio de 2015

Hay un Espíritu...

Hay un Espíritu que permanece despierto cuando dormimos, que crea la maravilla de los sueños. Es el Espíritu de la Luz, que en verdad se llama el Inmortal. Todos los mundos descansan en ese Espíritu y nadie puede ir más allá de él.

martes, 7 de julio de 2015

Tú.

Si, así vivo yo con pocas horas de dormir y pensando mucho en el ayer.
Complicada situación que a veces quisiera olvidar pero siempre me gusta recordar.
Amor, sigues robando mis suspiros, sigues tocando la bella melodía que solo yo puedo escuchar.
Tú, el violín, tus cigarros, tu aroma, tus besos, tu piel, tus versos, tu melodía, tú…tan solo tú.
Quisiera amanecer contigo cada vez que tus ganas quieran conmigo y abrazarte como si fuera la última.
Disculpa si sigo con este relato que no tiene fin pero es que no puedo contener las ganas de este amor que se me hace imposible de olvidar, quizás…
Cierro los ojos y comienzo a construir cada episodio a tu lado, suspiro y desaparece toda mi imaginación y es ahí cuando mi rabia no se contiene.
Si, eh llorado muchas veces, sola, con gente, qué más da.
Ya no recuerdo cuantas veces escribí por ti, ya no recuerdo cuantas veces me has rechazado, tampoco recuerdo cuantas veces me dijiste que no me amabas, ya no recuerdo cuantas veces eh repetido esto y no consigo olvidar.
Te vuelvo a escribir por si mañana no sigo viva y ya no pertenezca más en tu vida.
Por si mañana no consigo entender una vez más que esto lo hiciste por los “dos”
Por si mañana se me distorsionan una vez más los recuerdos que me llevan amarte y odiarte.
También te escribo por si mañana se te vuelve a olvidar que te amo.
Por si mañana se te olvida mi locura.
Por si mañana sigas dudando de mi amor.                                    
Pero sobre todo por si mañana olvidas que fuiste tú el amor de mi vida.







lunes, 22 de junio de 2015

Tres mujeres viven en mi.

Me llevo un cierto tiempo comprender de que se trataba,
sabía que algo estaba mal, pero me había cansado
eso de arrojar siempre la basura afuera y ver los errores ajenos sin considerar los míos.
 Y fue entonces que llegue a la conclusión de que ese volver a mi centro, del cual tanto había escuchado, pero no conseguía elaborar, se trata, al menos para mi, de poder aceptar que dentro de mi vive esa NIÑA caprichosa, rebelde y ansiosa por que la vean y la amen, que quiere lucirse y que le presten atención,  busca tener la razón y se enfada cuando los demás no hacen lo que ella espera......
Junto a ella vive esa MUJER que ya no necesita de nadie, ni demostrar nada, que sabe lo que quiere, y es consciente de sus incoherencias, pero por sobre todo asume que debe hacerse responsable de lo que elige para su vida.
Y a su lado, en algunos momentos, aparece junto a la NIÑA y a la MUJER, una ANCIANA, ella se mueve con lentitud y camina encorvada, muchos años ha vivido y sus ojos resplandecen de sabiduría, demasiada diría, más de lo que yo hubiera imaginado. 
Ella es quien dice "Ya está, hasta aquí es suficiente." aunque otras veces dice "Vamos, que un poco más aun se puede", y me habla y mira con complicidad y ternura, otras veces más severamente pero la mayoría de las ocasiones simplemente no dice ninguna palabra porque no es necesario y yo igualmente la comprendo.
Las tres viven dentro de mí. Y si consigo escucharlas, y aprenden a convivir, y se comienzan a ver, allí mismo donde se unen las tres miradas. He descubierto que allí mismo se encuentra mi centro, ese que tanto he buscado.

La bruja murmuró

... la Bruja murmuró...

La Luna, mi Abuela
Mi Abuelo, el Fuego

El Cielo, mi Padre
Mi Madre, la Tierra...

y yo pregunté...y el Agua qué es?
y ella respondió...El Agua son Nuestras Emociones, El Agua Somos Nosotros.

Gracias Alejandra Baldrich.

jueves, 11 de junio de 2015

¡Begins Again!

 La libertad no se OBLIGA
Entonces será que todo lo que escribo es por vos?
Será que todo mi amor es mi inspiración en plena madrugada?
Como quitar está herida profunda de mi corazón, me está doliendo la cicatrización…
Hoy te eh recordado como cada noche al acostarme, te extraño tanto, es como si estuviera en una prisión, viviendo con la ausencia, pena y tentación.
Dime hombre, donde dejaste el respeto, donde dejaste el amor, todo me hizo demasiado pobre…
Eh perdonado lo imperdonable y me eh comido todas tus burlas, será posible que nunca estuve bien de la cabeza? Como perdonar algo que no tiene remedio alguno.
Esta libertad me está atrapando día con día, me está liberando de tu alma, me está hablando un poco más de la vida.

Mi cuerpo y mi cabeza esta para un rompecabezas de mil piezas, no tiene reparo nada de este daño.
Mis ojos piden auxilio porque lloran al saber que mi corazón no sonríe más.
Esas manos mías piden agritos no ser tocadas al igual que mi cuerpo.
Me eh bañado mil veces para quitarme tu aroma de mi piel, pero no se va, siguen tan intactos como tu recuerdo.
Pregúntate, que te hice y seguro tu respuesta será nula.
Me has causado la sensación más grande de la vida, el olvidarme como debo amarme,  ah olvidarme donde deje mi orgullo, dignidad, mis ganas de superación, fuiste egoísta y mucho patán, me he convertido en un ser que todo le da igual, todo; incluso tu amor, pero eso no es amor es una obsesión.
Me has enseñado que jamás debo suplicar, ni implorar nada por nadie menos por tí
Me has enseñado que hay diferentes tipos de amor, el amor incondicional, me volví experta en ello.
Me has enseñado a callar cuando este frente a ti, hacer hipócrita conmigo y con todos, a llorar en silencio pero sobre todo a sonreír cuando me preguntan él porque, no tengo nada más que decir solo que me has enseñado LO QUE ES ENAMORARSE Y A LA VEZ ODIAR COMO NADIE.
Me has enseñado que  uno jamás se debe entregar al 100% porque el que se enamora pierde.
Me has enseñado que hacer el amor es solo de un día y no para siempre.
Me has enseñado hacer una mujer más fuerte.
Sobre todo me has enseñado que jamás pero nunca jamás debo llegar borracha a gritarte lo mucho que te amo.

Entonces ahora puedo decir que se acabó la tormenta, me eh graduado, soy fuerte y sobre todo estoy aprendiendo que jamás se debe forzar ninguna de las cosas, que se tiene que abrir bien los ojos antes de amar, pero sobre todo te tropezaras muchas veces más pero está en ti levantarte lo más rápido que puedas.  
Estoy tan cansada, sobre todo escribir el mismo cuento, tu vida con la mía.
Pensé alguna vez que sería difícil, si es difícil y muy difícil pero no imposible.
Tengo que seguir con lo mío, sin este drama constante que es más adictivo que tus besos o de la misma forma.
Todo lo que deseo para ti y para todos es el bien, porque en mí no existe el odio, no existe rencor, existe pena si pero jamás aborreceré tu nombre, quizás si un poco pero no te voy a desear el mal nunca, aunque mis ojos y mi cuerpo se paralice al verte.
Tengo mil cosas por hacer:
Tengo que ser mejor hija
Tengo que ser mejor hermana
Tengo que ser mejor nieta 
Tengo que memorizarme este rol de vida
Tengo que ser profesional
Tengo que cumplir mis sueños
Algún día me casare
Algún día seré mamá si esta vida quiere premiarme de nuevo la dicha que alguna vez rechace.
Algún día nos volveremos encontrar y sé que será pronto pero para entonces yo seré otra persona.
Tengo que ser más fuerte día con día porque de amor nadie se muere.